Es fundamental que conozcas de motocicletas si es que tienes una moto y te gusta disfrutar de ellas. El uso de la moto requiere que la conozcas y que sepas de algunos cuidados. Aquí te dejamos algunos detalles de sus principales partes y componentes. Presta atención.
Está ubicado en el manillar derecho y sirve para aumentar las revoluciones del motor, es decir acelerar. Cuando uno acciona el acelerador, el carburador o sistema de inyección de la moto introduce la mezcla correcta de aire y combustible para producir combustión.
Sin el acelerador no podrías andar. Es fundamental para que puedas mover tu moto y cualquier otro carro.
Si alguna vez tienes problemas con el acelerador, normalmente tiene una sola razón: se cortó el cable de aceleración. Reemplazarlo es fácil y comprarlo no es costoso.
Es el encargado de desacoplar el motor de la caja de cambios para así cambiar de piñón al interior según la marcha en la que vas en la moto. El embrague, que se acciona con tu mano izquierda, permite que salgas en primera, pases segunda, luego tercera y así. Es fácil identificarlo, es la palanca que está en la mano izquierda y que es igual al freno delantero de una bicicleta.
Hay motos semiautomáticas que tienen un sistema llamado embrague centrífugo, en el cual solo eliges la marcha en la que andas con tu pie izquierdo, como en cualquier moto, la diferencia es que no necesitas accionar el embrague para pasar cambios.
Los problemas podrían aparecer si no te entran los cambios. Comprueba que las marchas entren siempre suavemente.
Una moto con buen frenado suele traer freno de disco al menos en la rueda delantera, puesto que es el freno que más se usa en la moto y que más trabajo tiene, pues es el primer encargado en detener el movimiento de la moto. El freno de disco requiere de cambio de pastillas cada ciertos kilómetros. Consulta el manual de tu moto para saber cuándo hacerlo.
También están los frenos de tambor, que muchas motos traen en la rueda trasera y las más básicas o antiguas, también en la delantera. Es un freno más mecánico y menos eficiente. También requiere de mantención de balatas y otras piezas. Consulta el manual de tu moto.
Revisa siempre que tus frenos no estén ni muy duros ni muy blandos y que responsan fácilmente cuando andas. Si sientes que no está frenando bien es hora de reparar o hacer su respectiva mantención.
¡Ah!, no te dijimos. Normalmente el freno delantero está en la palanca derecha del manillar, mientras que el freno trasero lo accionas con la palanca que está bajo tu pie derecho.
Es el esqueleto de la moto, es la pieza que soporta prácticamente todo el aparataje de la moto. Al chasis va sujeto el motor, la caja de cambios, el tanque de gasolina y las horquillas trasera y delantera. Es decir, toda la moto.
El gran problema que puede tener un chasis es que esté quebrado producto de óxido o algún accidente grave. No es común que tenga problemas y de haberlos, se da más en motos de enduro o motocross que en motos de calle.
Una moto, sea cual sea su potencia, necesita de buenos zapatos, es decir buenas ruedas. Los neumáticos acá son tanto o más importante que en los carros. Esto ocurre porque en una moto la carrocería eres tú. Es decir, no puedes descuidar nada si no quieres sufrir un accidente.
Los neumáticos requieren fundamentalmente de dos cosas: que estén con su dibujo en buen estado y que la presión de aire sea adecuada. Si el neumático está muy desgastado va a perder aire o bien vas a pinchar bastante seguido, aun teniendo cámara de aire. En cualquiera de los dos casos tu moto pierde tracción y te podrías caer. Ojo, revisa periódicamente tus neumáticos.
A la vez, en lo que a rueda respecta. El estado del aro o llanta debe ser óptimo, sino la rueda no gira como corresponde y además podría producir pérdida de aire. Al mismo tiempo, ponte a un costado de cada rueda y con tu mano empújala y jálala hacia ti. Si hay algo de juego, debes reemplazar o eje o rodamientos, si no hay juego, todo está bien.
Existen tres tipos de transmisión para una moto: cadena, correa y cardán. De todas ellas la más común y eficiente de todas es la cadena. Eso sí, es la que más mantención requiere, puesto que está expuesta a tierra, polvo y por supuesto trabajo mecánico.
La cadena debe estar siempre limpia y bien lubricada. Si no lo haces, desgastas tu transmisión al punto de tener que reemplazarla antes de tiempo.
Si vives y andas en moto por la ciudad, límpiala y lubrícala una vez a la semana. Si vives en lugares con caminos de tierra y polvo, lo ideal sería limpiarla y lubricarla cada vez que la usas. En este caso, es mejor tener cadena con retenes, puesto que impiden que se meta polvo y suciedad demás en las cadenas. Con retén dura más.
Además, debes ver qué tan tensa está la cadena de tu moto. Pide que te tensen la cadena periódicamente, si comienza a perder tensión con facilidad, quiere decir que es hora de reemplazar tu transmisión.
Existen de distintas cilindradas. Comienza en los 50 cc hasta 1.000 cc o más. Hay motores de todos los tamaños, para todos los gustos y necesidades. Lo importante aquí es que si eres principiante no compres una moto tan grande. Bueno es familiarizarse con las pequeñas y urbanas como alguna 50, 100, 125 o 150, por ejemplo.
Con cilindradas más pequeñas, podrás controlar más fácil la moto por dos cosas. No deberías sufrir con arranques galopantes de potencia y a la vez suelen ser muy livianas, por lo que son más maniobrables.
Más allá de la cilindrada los motores de motos requieren de la misma mantención que un carro: cambio de lubricante, bujía y filtros de aire, gasolina y aceite, entre otros. Haz regularmente las mantenciones de tu moto. Si no sabes cómo elige un taller para hacerlo.
Están las que son automáticas, semiautomáticas y las regulares. Lo importante es que dentro de ella hay 4, 5 o 6 marchas para llevar a tu moto a la máxima velocidad o al máximo torque dependiendo de la marcha en la que vas rodando.
Es extraño que fallen, pero si lo hace, llévala al mecánico, necesita estar en perfectas condiciones. El primer síntoma es que no entren las marchas o se desacoplen mientras andas.
Ojo a veces puede ser solo la palanca de cambios la que tenga problemas. Es fácil y barato de reemplazar si así fuese.
Quisimos poner ambos componentes en el mismo punto porque están directamente relacionados. Hablando de motos más básicas, la batería solo es utilizada para dar arranque con el botón de partida y para tocar el claxon.
Si al dar arranque, la moto hace un chasquido, o está floja de arrancar puede tener la batería desahuciada. Si ocurre, puedes cargar la batería para usarla, pero tarde o temprano deberás reemplazarla.
Es el responsable de expulsar los gases producidos en la combustión de la moto, a la vez reduce las vibraciones y el ruido del motor.
En la industria automotriz, que, por supuesto incluye a las motos, los tubos de escape tienen muchas funciones técnicas y otras también estéticas, sobre todo en el caso de las motos, ya que una buena salida de escape además de hacer un rugido más atrayente para los que somos tuerca, también llega a ser un aspecto decorativo, sino miren a las Harley Davidson con sus escapes cromados.
Por otro lado, las motos enduro o de motocross, a veces vienen preparadas con salida desde la culata hacia el tubo de escape, la llamada pipa, con una estructura más gruesa que acumula los gases de tal forma de mejorar le deportividad de la moto. Un ejemplo son los escape FMF.
A la vez, en cualquier moto están las motos con escape libre o convencional. En los escapes convencionales viene el silenciador y en las motos más modernas otros sistemas de retención y manejo de gases que mejoran el consumo de la moto y bajan su contaminación, pero también su potencia. En cambio, el escape libre administra la salida de gases del motor de una forma más directa aumentando el sonido, las vibraciones, el consumo de gasolina y la potencia
Obviamente las luces son para alumbrar el camino y señalizar cuando uno va a virar, pero en el caso de las motos, la luz es importante incluso de día.
En los días con calor y sol, si vas por la carretera en moto, el resto no puede verte, ya que la moto se pierde en el horizonte. No obstante, ir con las luces encendidas hace que el resto advierta tu presencia antes.
Es fundamental que las luces estén en buen estado, porque te permite ver el camino de noche y que te vean de día. Revisa periódicamente que todas las luces enciendan.
Estos tres accesorios juegan el rol de mejorar la seguridad y el confort del motociclista. El asiento debe ser cómodo, idealmente ser de un material que no se caliente mucho con el sol o el uso prolongado. Debe ser ergonómico para cuidar la salud del motociclista, primero por la posición de manejo y segundo cuando pasas baches.
A la vez, el asiento debe estar bien fijado a la moto, que esté suelto podría hacer que te caigas. El manillar también cumple un rol ergonómico y en el caso de la seguridad, si te gusta ajustar su posición aprieta bien sus pernos, no vaya a ser que se suelte andando.
Los espejos, cromados pueden ser muy lindos, pero lo importante es que debes tenerlos en el ángulo y altura adecuada, sobre todo si andas en la ciudad. Mira bien por tus espejos antes de virar, cambiar de carril o adelantar.
Hoy en día la tecnología aumentó y las motos más básicas, que también son las más vendidas, traen carburador; mientras que las más osadas y tecnológicas incorporan inyección electrónica de combustible.
El carburador es el corazón de la moto. Es el encargado de inyectar la mezcla ideal de combustible y aire desde a los cilindros, donde aparece la chispa de la bujía, que en conjunto con la gasolina y el aire, hacen la combustión para que el motor genere movimiento y puedas andar en moto.
Afortunadamente, hoy el carburador es una pieza barata de reemplazar. En la antigüedad había kit de reparación para carburadores que eran eternos; hoy en día, sobre todo en las motos de baja cilindrada, si es que hay problemas que persisten, lo mejor es cambiar el carburador.
¿Qué problemas puede presentar? Un carburador sucio o en mal estado, no va a dejarse carburar y la moto tendrá ralentí disparejo e incluso podría no mantenerse encendida y apagarse. En otros casos, no trabaja bien por suciedad o desgaste y ahí la mezcla es ineficiente, aunque uno carbure la moto, produciendo pérdida de potencia.
Otro problema que es fácil de notar es con el consumo de combustible. Si de pronto la moto comienza a gastar gasolina como si fuese un motor V8 de un Mustang, entonces quiere decir que tu moto está perdiendo gasolina por vaciamiento del carburador. Cuando ocurre o bien gastas gasolina como condenado, o bien tu moto se ahogará por tener el carburador repleto de gasolina sin quemar. Reemplaza tu carburador en ese caso.
Lo que más luce de la moto, que prácticamente marca su estilo o su color es el tanque de gasolina. Quizás más de alguno vio American Chopper en televisión. En ese show de TV la importancia del tanque era tal que le daba la personalidad que buscaban a la moto.
En términos técnicos es donde almacenas la gasolina que posteriormente va al carburador para iniciar la combustión. Lo importante es que a la salida del estanque y antes de entrar al carburador haya un filtro de gasolina que retenga las impurezas que genera el propio tanque con gasolina en el interior.
Si no sufres caídas o accidentes, tu tanque de gasolina debería ser eterno.
La suspensión de la moto es muy importante para la performance de la moto y para la comodidad del piloto. La suspensión debe estar en buen estado, puesto que te ayuda a entrar mejor a las curvas y a mantener la estabilidad de la moto en general.
Una suspensión muy blanda puede hacer que literalmente te comas un bache en el camino pudiendo caerte, te puede hacer perder estabilidad en alguna maniobra o podrías sufrir problemas con tu espalda.
En cambio, una suspensión muy dura también te podría generar problemas de rebote o pérdida de tracción, que podría provocar un accidente. Revisa periódicamente la suspensión, evalúa cómo se siente y si notas algo extraño, llévala a tu mecánico.
Revisa todo lo que necesitas saber sobre los documentos de tu moto con: